domingo, 6 de abril de 2014

El fino arte de recordar.


Tu espalda lleva escrita nuestra historia, tiene marcado cada beso que le di en nuestro tiempo y que solo yo puedo verlos. Tras tu aparente imagen de felicidad se esconden los momentos de locura y buen sexo que solíamos practicar en tu habitación, sobre los muebles, la cocina, el baño y debajo del edredón. Tienes reflejada aun cada palabra pronunciada con el propósito de hacerme suspirar. Esos labios carnosos que conozco a la perfección conservan las sombra de los míos, con el sabor intacto plasmado; en caso de que se te antoje revivir esos encuentros en tus pensamientos utiliza las manos, juega con ellas, siente y saborea, finge unos cuantos minutos que estoy ahí, observándote, ¡tócate pensando en mí! haz el mismo recorrido que yo solía hacer con mis dedos usando tus lunares como guía, siente el peso de mis senos en tu pecho, ayuda a tu memoria a recordar cuando sin aliento me posaba sobre él.

El delirio de tus oídos por escuchar nuevamente mis gemidos es equivalente con el que sienten tus ojos por verme modelar semidesnuda con tu prendas ligeramente puestas para seducir tus cinco sentidos provocando que tu cuerpo exija  que mis uñas le hagan daño como en los pasados encuentros apasionados. 

Nuestras pieles a centímetros una de la otra son una obra de arte delirante, yo tu musa, tu mi artista, el cual pone a volar su imaginación para decorar mi estructura con su arte. Tócate y sigue inventándome en tu cama, sobre tus sábanas blancas, sigue haciéndome protagonista de tus noches, de tus pensamientos, porque como buen cobarde no aprovechaste al máximo los momentos y hoy me toca marchar lejos de ti, de esta realidad; si te sirve de consuelo de vez en cuando también te recuerdo con mis manos recorriendo todo mi cuerpo, a ojos cerrados, como antes solíamos hacerlo.

lunes, 31 de marzo de 2014

Cumulo de decepciones.






Comienza la decepción, vino a burlarse de lo tonta que fui al creer que no solo buscabas diversión sino amor, pero no, como siempre la equivocada de la historia soy yo, haciéndome la fuerte te demuestro que no tiene mucha importancia el haberte visto marchar, con la frente en alto y sin dudar, así como quien se burla de la niña tonta enamorada de la historia con un final inesperado que acabó mal.

Desde un comienzo tenias doble personalidad, y ¡vaya! que mientes de manera admirable, si que sabes ocultar lo que realmente sientes y manipulas a tu merced. No niego mis errores, lo de saber controlarme para actuar sin impulsividad es algo que no se me da muy bien, sin embargo estuve presente en cada aspecto de tu vida, mientras tu seguramente pensabas en otra, y que tonta fui... bueno soy, porque aun lloro por ti.

Si con solo desear pudiera obtener lo que quiero aun te tendría y si, así de masoquista soy, aun queriendo creer que eres para mi y que podría funcionar. Yo misma soy la responsable de estar volviéndome loca de confusión porque decidiste irte sin explicación, pero apenas eres un niño, el niño que me enamoró, aun tienes esos arranques de inmadurez que me lastiman, en vez de enseñarme y progresar conmigo, me hundiste a lo mas profundo, hoy me pesa ver el tiempo perdido.

Todos tenían razón la que tenía una venda puesta en los ojos era yo, enredándome en tu vicio, en tu mundo absurdo y bajo que no llegará a ninguna parte. Metí la pata hasta el fondo donde estas hundido. Cada recuerdo me aturde, mis noches son para pensarte, mis días para intentar no recordarte.

Fue lindo mientras me lo creí, eso si lo debo admitir; tengo una caja llena de nuestros recuerdos que están esperando que me llene de valor para abrirlos y deshacerme de ellos. A veces, solo quiero ir a donde estás aunque se que no te importará y preguntarte ¿dónde quedó el para siempre y por siempre?.

Me siento sola y engañada, me siento usada. Cada que puedo intento hacer devolver el tiempo en mis pensamientos para que no recuerden lo vivido contigo, pero lamentablemente está tatuado todo ahí, es algo permanente, que hace que llore, que grite mientras presiono la almohada contra mi boca para que el ruido se simplifique.

Te desconocí completamente, con ese lado tuyo lleno de odio, que disfruta el hacerme sentir mal, y quisiera odiarte, lo he intentado mas de una vez sin éxito. Es una ironía que el único que logró que lo amara fue también el único que me hizo daño, ¡vaya que te extraño! es todo un reto intentar no sentir, ser dura, pero todo esta plasmado y aun siento que estas ahí. Si me alejé de ti fue para protegerme, no porque no te quisiera simplemente para no tener que presenciar tu desprecio, para no tener que ver diferente tu mirada. Soy fuerte al tratar de no involucrarme, evitando lastimarme.

Y si me equivoqué, muchas veces pero siempre estuve para ti. A pesar de mis errores, a pesar de cada defecto y mal, espero algún día sepas que tu niña aun te ama pero prometió llorar hasta olvidar que fuiste tu quien la enseñó a amar.

domingo, 29 de septiembre de 2013

La ausencia duele mas que el mismo error.




Quizás si, quizás no.  Esta noche me consume la duda del estar contigo o dejarte ir, porque no importa cuantas veces digas lo siento los errores lastimosamente no se reparan así.. no para mi al menos. 

Tanto me ha costado construir esto con las manos y lo derribo con los pies, sin pensarlo, sin medirlo, sin anestesia solo por orgullo, rabia y decepción que juntos hacen sacar lo peor de mi. Y aunque intentes repararlo, el orgullo me consume solo por querer hacer esto perfecto y no, no me entiendo ni yo misma.. porque de hace horas no tengo coherencia y tu me haces ser así. Te amo sinceramente aunque ahora lo este negando frente a ti pero me cuesta ser abierta y es que ya he llorado hasta mas no poder, hasta quedarme dormida entre las almohadas y sabanas frías, sola y sin compañía.

Un error que debo aceptar sabiendo que puede volverse a repetir y ese error no involucra terceras personas, tampoco a la falta de tiempo o descuido, porque jamás me has lastimado de esa forma, al contrario esto es mas complicado, comienza por celos sin razón,  por sensibilidad, por faltar el respeto todo gracias al temor de perdernos. Me parece una gran ironía que por el mismo temor a perderte indudablemente me daría cuenta que te perdería. 

La ausencia es dolorosa por ello perdonamos infinidades de errores, por ello continuamos luchando aunque a veces no tenga arreglo... hoy sentada a solas me estoy sincerando conmigo, aferrada a lo nuestro, contando mis fallas y las tuyas que no superan a los aciertos pero si que nos han tropezado, jugando y riéndose de nosotros y planeando la siguiente jugada por si nos levantamos dispuestos a seguir. He cometido desaciertos pero también te he aceptado los tuyos, juntos seguimos ciegos creyendo en nosotros.

Somos así nos amamos con la misma intensidad que peleamos, nos amamos con la misma fuerza que gritamos palabras dolorosas, nos amamos con la misma insistencia de seguir en una relación, nos amamos como la primera vez, sin perfección, sin frenos, sin remordimientos, sin pensarlo. 


miércoles, 28 de agosto de 2013

Síndrome incurable.




Una de tantas noches ansiando que sea el día, el reloj marque las doce anunciando que es veintinueve y sea el momento justo en el que pueda enorgullecerme un poco más de lo que con el tiempo llegué a querer y si me refiero a ti, a ti que me soportas en cada faceta, que sin importar cuan fea este de tu boca no salen otras palabras que no sean para halagarme, a ti que siempre tienes un lugar reservado para mi y una sonrisa dispuesta por si se me agota la energía y resulto teniendo un mal día y quiero solo olvidarme del mundo; ya hasta creo me extendí detallando cada gesto que tienes para mí y es que no dejo de hablar de ti ya hasta sospecho estar padeciendo del incurable síndrome que yo nombré como 'estar enamorada' ese común síndrome que muchos padecen y pocos saben lidiar, quizás por eso siempre tuve miedo y tu como buen compañero has estado intentando resolver 'ese miedo' para ir despejando una a una las dudas y dejando claro que con todo y tus locuras estas dispuesto a quedarte aquí, a mi lado para hacerme una chica mas segura.

Son muchos los recuerdos que vienen a mi mente, muy felices recuerdos debo destacar que no me alcanzaría a contar todos en una sola noche, en un solo escrito, pero si que están bien metidos en la memoria para cuando se me antoje recordar y dejarlos salir para contarle a alguien mas lo maravilloso que ha sido compartir cada momento contigo, ya hasta me imagino contándole a mis nietos esas travesuras, las escapadas y cada aventura.

Siendo honesta he sido bastante orgullosa últimamente por el hecho de ocultarte esta parte de mi que siente tanto y tiene tanto por decir, solo por miedo, miedo a que me vayan a herir, se que con el tiempo podré adaptar la palabra clave de este síndrome incurable, algún día diré sin miedo 'enamorada' y me adaptaré a decirla cada vez que te agradezca por la felicidad que me das, me arriesgaré a mostrarte un poco más. A estas alturas cuestiono lo que pueda pasar en el futuro por eso quiero estar clara de mi presente, quiero disfrutarte, gozar hasta el mas mínimo detalle, sonreír y llenarme de ti.

Dentro de toda esta historia quiero a los terceros bien lejos, poco me importa alguna otra opinión y no tengo planeado explicar mis razones por si quieren juzgar lo apresurado que ha sido esto, si antes no había sentido algo parecido estoy dispuesta a demostrarte poco a poco lo que hace días no he podido ni nombrar y es que lo lograste... has sido el primero que me llegó a enamorar, a partir de ahora no hay arrepentimiento vamos juntos a seguir caminando de la mano y riendo logrando conseguir lo que siempre queremos porque de algo estoy segura... que me quieres y que te quiero.

viernes, 2 de agosto de 2013

Encuentro casual.




Algunos lo llaman destino otros casualidad, yo le pongo tu nombre. 

No es costumbre que yo cene fuera de casa un día de rutina pero ese 04 de diciembre se me antojó compartir conmigo misma como quien solo quiere pensar y alejarse un poco de aquello a lo que está acostumbrada. Tu muy raras veces estas solo casi siempre estabas rodeado de imbéciles que alababan cada éxito que tenias cuando alcanzabas lo que te proponías. Pero esa noche solo estábamos ahí tu y yo en ese restaurant para ambos alejarnos de todo, como al encuentro de algo diferente sin saber qué solo nos atrevimos a salir en busca de un poco de liberación y así fue como terminamos uno frente a otro algo sorprendidos del encuentro repentino y sin ninguna planificación como si fuera el destino que quiso jodernos una vez mas las vidas con eso de traernos confusión y viejos complicados, pero en fin buenos recuerdos.

Pedimos una mesa para dos y comenzamos aquella extensa conversación aburrida sobre el trabajo, la familia y relaciones poniéndonos al día después de esos años separados sin saber nada entre ambos, a medida que pasaba el tiempo me daba cuenta como nos fuimos perdiendo, como ya no eramos los mismos... como ahora te interesaban otros temas. ¿Que carajos pensabas cuando me hablabas de deportes? tu mas que nadie sabias cuanto detestaba ese tema, al parecer lo hacías a propósito  siempre disfrutaste el hacerme enojar y verme molesta para luego contentarme por arte de magia en cuestión de minutos. 

Aun sonreías pero no como antes, se notaba un poco cansada tu sonrisa por eso te propuse ir a dar un paseo después de esa deliciosa cena quería comprobar si aun eras ese chico que le encantaba hacer locuras con la sonrisa viva, con ganas de disfrutar y ese espíritu vibrante que me hacía volverme loca cada vez que teníamos "esos encuentros seguidos a escondidas" durante la preparatoria.

Fuimos al parque y me miraste fijo para mencionar que ya sabias que estaba tramando, sonreí y respondí que hace horas atrás pensé que no eras el mismo pero me demostraste que me había equivocado y saltamos, gritamos y nos divertimos como antes olvidando las obligaciones, la rutina y los problemas. Seguías siendo aquel chico interesante que siempre me gustó. 

A esas alturas de la noche no quería saber porque entre los dos las cosas no funcionaron años atrás, no quería reclamos ni dramas con explicaciones incluidas solo quería una cosa que por su puesto sucedió... de la manera perfecta, ese beso con sabor a te extrañé tanto, ese beso que vino acompañado de recuerdos, que hizo que viajara por cuestión de segundos al pasado, ese beso que ahora muy bien voy a guardar en mi memoria junto con aquella especial noche porque se te había olvidado mencionar que  ahora estabas casado y aunque tu y yo sabemos que nos queremos como antes debemos volver a pisar tierra y despedirnos, me abrazaste agradeciéndome por recordarte los buenos viejos tiempos y quien eras realmente, me diste un ultimo beso para así marcharte yo quede algo vacía caminando en dirección opuesta y ansiando que regresaras y me abrazaras un rato mas, pero aun pienso en un próximo encuentro que sé no ocurrirá pero no importa porque igual todas las noches saldré a cenar quizás nos encontremos otra vez por casualidad.

martes, 2 de julio de 2013

Se me antojó recordarte.


Se me antojó recordarte, con un cigarro en mano y una botella de mi mejor vino, escuchando esas mismas viejas canciones que solíamos escuchar, haciendo de este encierro una excusa para no marcharme y dejar de ver lo que me recuerda a ti cuando era feliz e infeliz, todo al mismo tiempo.

Con tantas preguntas en mi cabeza y tan pocas respuestas me ahogo en cada copa que bebo a fondo y es que ya me había acostumbrado a tus mentiras, pero no importaba mucho porque mientras mas las decías mas quería continuar contigo como expresión máxima del masoquismo.

No bastó el solo querer porque sino te tuviera aquí conmigo, nos dejamos vencer por el orgullo y el tiempo. Sin embargo el mayor golpe fueron los cambios, el pensar distinto, las peleas de ocasión y el que yo te quisiera para largo rato y tu solo por diversión.

Se murieron mis ganas de luchar mientras me preguntaba si tu querías continuar. Hoy aun te recuerdo bien como solías ser, sencillo, frío y arrogante pero con los pies en la tierra. Ya has cambiado te importan otras cosas ahora y andas por ahí fingiendo ser quien no eres. Hoy te desconocí con un gusto diferente.

Pero yo seguiré siendo la misma de siempre y me quedaré aquí sentada esperando a que te provoque recordar lo que una vez fuimos.

lunes, 1 de julio de 2013

Pecadora por excelencia.


Quédate callado, no emitas comentario alguno que lo que sea que vayas a decir está demás, no quiero cuestionarnos y tener otra vez que admitir que lo que hacemos está mal.

Bebe cuantos tragos quieras y pongamos a volar la imaginación y así olvidamos por un momento la realidad que nos espera enfrentar fuera de esta habitación. No quiero mas lamentos y reproches, nos conocemos de tiempo atrás y ambos sabemos lo que queremos, tanto nos conocemos que se perfecto pensamos igual y varias veces podría asegurar que como yo te has preguntado ¿por qué el tiempo nos juntó en el momento incorrecto? por eso de tener que escondernos para hacer lo que queremos y es que en el arte del engaño eres todo un maestro, siempre pretendiendo no conocerme para que nadie sospeche.

Ven, se que no venimos a hablar demasiado puedes sentarte y observarme un rato con disposición a comenzar porque yo se que te gusta portarte mal y aquí me tienes de frente dispuesta como siempre a pecar.